Existe una forma de aprehender que va mucho más allá de la causa y el efecto, del razonamiento cartesiano, del puro silogismo. Es por ello que, aunque la palabra escrita nos ha permitido avanzar como civilización – haciendo del progreso técnico una de nuestras utopías más irrenunciables -, hay veces que es insuficiente. Es una forma que trasmite parte del significado, pero que, por algún mecanismo mental de autocensura, pierde parte de la información que se había generado en el cerebro “a priori”.
La abstracción, en este sentido, nos ayuda a visualizar – gracias al símbolo y la metáfora – lo que se ha quedado en el camino, en esa especie de transición. ‘La arquitectura del fracaso’ es hacerse consciente de esta limitación del lenguaje escrito para, con los instrumentos de la intuición y lo espontáneo, construir brechas de pensamiento que “lean” desde un campo de visión diferente. De esta manera, a través de la pintura y el collage, exploramos esos territorios, que nacen como rizomas, y que buscan interpretaciones paralelas a las lecturas de textos literarios y filosóficos.
‘La arquitectura del fracaso’ es una propuesta plástica que bebe del expresionismo abstracto norteamericano, y de escuelas más cercanas como El Paso o Dau al Set, para intentar generar un diálogo entre las diferentes artes y procesos de conocimiento. Así, todos pintamos con la mirada, pensamos con el trazo, o saboreamos los viajes cinematográficos. Pero “fracasamos” en la persecución de la plenitud porque, seguramente, el único desenlace posible es reconocer la arquitectura como un constante movimiento.
[Muestra de arte Stripart. Del 2 al 15 de julio]